¿Cómo esperar que tu vida sea apreciada por otros, cuando tu misma no la aprecias? Y es que en tanto tiempo siempre te has dedicado a vivir a y por los demás. Siempre has entregado todo, siempre antes que tú, siempre primero otros; y la vida no es así, la vida cuando se presenta la primera oportunidad te da una tremenda bofetada y te lanza lejos sin miramientos de nadie.
¿Recuerdas lo que tu madre te decía; te dijo una vez hace ya mucho, mucho tiempo, ¡¡hija piensa en ti alguna vez!!. Y tu no lo has hecho, siempre pensando que la felicidad de otros era tu felicidad, siempre pensando que hacer y entregar todo haría feliz a otros y tu viendo feliz a los otros eras feliz.
¿Te das cuenta lo equivocada que estabas?
La felicidad no radica, ni es el núcleo en hacer feliz a los demás. Para hacer feliz a los demás tienes tú que ser feliz primero y así poder expandir esa felicidad. El sacrificio, la entrega, el dar y dar no es hacer feliz a los demás.
Y ahora te veo cada vez más en el fondo donde no puedes salir. Y lo más triste es que me haces sentir lastima, lastima de ver que no puedes ver el valor de tu vida, lastima de ver que piensas que la vida no vale nada, que la vida se detuvo, que la vida te lastimó, que la vida no te valoró, que la vida te dio esa bofetada y te lanzo con tantas fuerzas que no pudiste levantarte.
Confianza, amor, entrega, no eso no basta para ser una vida digna, y menos para llenar la vida de otros. La vida se trata de que existen tantos sentimientos involucrados y tantas personas que no se pueden medir las acciones y menos exigir; porque la vida no es exigir, la vida es vivir. Pero si siempre te escucho decir que hay que vivir en vez de sobrevivir, y tú lo que haces es seguir en ese fondo donde la vida, y como tú dices, la puta vida te ha enviado.
Creo que la vida te está enseñando lo que te fue negado en toda tu vida, sufrir de verdad, vivir y sentir el sufrimiento, la necesidad, la angustia, la soledad, reventar de orgullo, hacer la humildad de aceptar las cosas como van y vienen y sobre todo la vida te está enseñando que nadie estará para ti solo porque siempre, pero siempre quieras que sean felices; la felicidad son pequeñas cosas y no entregarse por completo a crear felicidad. Eso es un engaño, la felicidad no se crea, la felicidad se siente, esta en el momento indicado y lugar que menos lo esperamos.
Sé que todavía no entiendes nada, sé que te esfuerzas por entender, y sé que sabes que nada ni nadie es culpable ante tal y cual situación. Que sabes que todos son libres de vivir y decidir, la libertad consiste en eso, en elegir entre todas las circunstancias cual será la que haga feliz, esa es la verdadera libertad, poder elegir y no dejar que nadie elija por ti.
Ahora lo que tienes que hacer es levantarte, y no poner esa otra mejilla para que la vida te de otra bofetada, no, atrévete, dale una bofetada tú a la vida, porque a veces hay que ser valiente para poder abofetear hasta tu propia vida y así poder despertar de ese mundo de fantasías que habías vivido y donde todo era "todos felices y comiendo perdices".
Y te darás cuenta de que los sacrificios no deben existir, que lo que se hace no es sacrificio, porque es la voluntad de cada quien hacer lo que han decidido y nada más.
Y te darás cuenta de que cuando aprendas apreciar de verdad la vida, ¡tu vida!, te darás cuenta "Que todo pasa por una razón" y esa razón no tiene explicación solo es una razón para aprender algo más en la vida.
Te seguiré hablando en otro momento y espero verte mejor. Tu Espejo.
Carlyn
No hay comentarios:
Publicar un comentario